En su último evento, Sony presentó la Playstation 4 Slim y la nueva Playstation 4 Pro, en un movimiento que muchos no nos esperábamos, como respuesta a ciegas ante Microsoft y su “Project Scorpio”.
Y es que muchos pensábamos, que como siempre, Microsoft y Sony iban a ir a la par y con muy poca diferencia, por lo cual, como desde Microsoft se anunció Project Scorpio para 2017, la nueva Playstation 4 “NEO” o Playstation 4 Pro iba a ser reservada para 207 y puesta a la altura de lo que Microsoft plantea.
Pero finalmente no ha sido así, Sony se ha adelantado casi un año a Microsoft, una estrategia bien diseñada colocando la nueva Playstation 4 Pro al precio que tenía la Playstation 4 normal hace pocos meses, y rebajando la nueva Playstation 4 Slim a un precio muy muy competitivo.
El problema de Sony
Hay algo en lo que Sony ha fallado, y es la rivalidad, su nueva Playstation 4 Pro posee 4 Teraflops de potencia gráfica disponible, lo que está muy bien para conseguir la tan ansiada tasa de 60fps en todos los juegos FullHD, e incluso emular la resolución 4K mediante la técnica de reescalado, pero que no otorga a la Playstation 4 Pro la potencia suficiente como para ejecutar videojuegos en 4K real.
Esta potencia extra le ayudará a mejorar el funcionamiento respecto a su anterior generación, reescalar a la nueva resolución, utilizar HDR y lo más importante, mover las Playstation VR con soltura, para proporcionar una experiencia VR a la altura.
Sin embargo, Sony ha dejado a su Playstation 4 un poco lejos de la propuesta de Microsoft, y es que Project Scorpio promete 6 Teraflops de potencia, que sería lo equivalente a sumar el rendimiento de una Playstation 4 normal y una Playstation 4 Pro, (y aún nos faltaría un poco para llegar), de esta forma, la nueva consola que Microsoft presentará el año que viene, será capaz de ejecutar juegos en resolución 4K nativa sin problema alguno, convirtiéndola, indudablemente, en la consola más potente del mercado.
El desafío de Microsoft
Microsoft plantea algo muy interesante con esto, y es que la nueva consola será el equivalente a un PC Gamer de alto coste económico, pero empaquetado en un dispositivo diseñado para jugar, con un diseño reducido y unas prestaciones dedicadas.
Esto, eso sí, conlleva un coste superior a 400€, ya que no cualquier tarjeta gráfica es capaz de suministrar 6 Teraflops de potencia, y es que si hoy en día quieres un PC capaz de proporcionar una buena experiencia de juego en 4K nativo, debes superar la barrera de los 1.000€.
La nueva Project Scorpio pues, tendrá una desventaja frente a la Playstation 4 Pro de Sony, el precio, resulta que no solo saldrá más tarde, sino que costará más.
Esta nueva consola se soportará también sobre Windows 10, aunque eso sí, a diferencia de un PC Gaming de élite, no superaría la barrera de los 1.000€, sino que se habla de un precio cercano a los 600€.
Si a esto le sumamos la rumoreada compatibilidad con ratón y teclado, tendríamos una combinación ganadora por parte de Microsoft, consiguiendo traer un PC Gaming a las grandes masas por un precio muy ajustado, y que sea el escalón superior a la Playstation 4 Pro, sin llegar a los costes y complicaciones de un PC de alto rendimiento.
Está por ver también si Microsoft permitiría la actualización de algunos componentes de Project Scorpio como alguna vez han dejado entrever, o si por el contrario seguiría el mismo sistema generacional que siguen ahora, haciendo que cada X años el usuario deba gastarse una gran cantidad de dinero en una consola nueva.
La excusa compartida
Para no ofender o menospreciar a sus consumidores actuales, y no dar pie a que los usuarios se sientan estafados, Sony y Microsoft han asegurado que estas nuevas consolas no terminarán la vida útil de las anteriores, de esta forma Playstation 4 y Xbox One seguirán recibiendo videojuegos, que serán compartidos entre las consolas actuales y las más potentes, aunque eso sí, reservando para estas últimas la mejor experiencia de juego y los increíbles niveles de detalle.
¿Merece pues la pena comprar una consola ahora?
Si tienes prisa, la Playstation 4 Pro es la apuesta de alto rendimiento de Sony, y el precio de salida es un precio justo por lo que ofrece, la espera ya ha terminado, comprar la Playstation 4 por 350€ era la mala opción, ahora dispones de una Playstation 4 (o Xbox One S) por 299€, una Playstation 4 Slim por casi 350€ y una Playstation 4 Pro por 399€.
¿No tienes prisa? Espérate, la espera puede merecer la pena, y es que Microsoft promete remover y poner patas arriba el mercado de las consolas con su atrevida y agresiva apuesta, si estás pensando en comprarte un ordenador para jugar, guarda el dinero, quizás con Project Scorpio tendrás lo mejor de un ordenador (su rendimiento) y lo mejor de una consola (su precio y experiencia de uso) en un solo producto, y si ese producto acaba decepcionando, seguramente la Playstation 4 Pro haya bajado de precio para ese entonces, pudiendo comprar lo que buscabas ahorrando un buen pellizco.
¿Y tú? ¿Vas a esperar a Project Scorpio o vas a comprar una consola ahora?
- Ver Comentarios