Disney ha decidido crear su propio servicio de streaming, una nueva alternativa para Netflix, por lo que se va a convertir en rival y, al mismo tiempo, socio de la popular plataforma. Seguirán trabajando juntos, pero el catálogo de Disney va a desaparecer de Netflix cuando en 2019 caduque su actual acuerdo.
La idea de Disney es clara, quiere convertirse una marca más visible para el consumidor, y ofrecer una plataforma propia, en vez de recurrir a las de terceros. No hay que olvidar que, aparte de las películas propiamente de Disney, el conglomerado del entretenimiento también es dueño de Pixar (el estudio de Toy Story, Monstruos o Buscando a Nemo) y de las franquicias de Star Wars y de Marvel.
Disney es una empresa conservadora en su gestión, hace tiempo se rumoreó que quiso comprar Twitter pero no se decidió. También se cree que negoció para adquirir Netflix, algo que va más en la línea de sus inversiones en apuestas seguras como Lucasfilm o Marvel, pero tampoco resultó.
Por lo de pronto, en Estados Unidos va a desparecer todo el contenido de Disney de Netflix a partir de 2019. En el resto del mundo, incluyendo España y Latinoamérica, en principio, no hay cambios, dado que el servicio de streaming de Disney se lanzará solo en Estados Unidos por el momento.
La apuesta de Disney, ahora mismo, parece enfocada al público familiar, por lo que se nutrirá de clásicos de Disney como El Rey León, La Bella y la Bestia y La Sirenita, pero también de éxitos recientes como Frozen. No faltarán las películas de Pixar, y otros contenidos específicos. Por otro lado, Disney también piensa en una plataforma para ESPN, un canal deportivo muy popular en Estados Unidos.
Lo que no tienen muy claro en Disney es cómo encajan Star Wars y Marvel con el resto de sus contenidos. Es posible que no se integren en el servicio que prepara, y que se abra uno diferente para estas franquicias un poco más adultas. Aunque tampoco se descarta volver a cederlas a plataformas de terceros como Netflix si no se encuentra una solución satisfactoria.
Marvel TV, una división de Disney, tiene varias series activas en Netflix, como Daredevil o Jessica Jones, que se van a mantener en el futuro, así que no podemos hablar de una ruptura en malos términos. Además, Facebook también piensa crear series propias, por lo que está claro que en el sector del vídeo en streaming se avecina una guerra comercial.
¿Qué opinas de este tema? ¿Crees que el servicio de Disney se convertirá en un éxito y acabará llegando a España y Latinoamérica?
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