Si mezclamos política y privacidad en Internet nos puede salir un cóctel demasiado amargo incluso para los más entrenados. Y es que se ha aprobado una ley que permite a los políticos enviar propaganda por WhatsApp sin nuestro consentimiento expreso.
Para muchas personas, un gran porcentaje podemos afirmar, la vida gira entorno a WhatsApp. Horas y horas delante de la pantalla del smartphone charlando, compartiendo y debatiendo. Y la propaganda de los políticos (de manera oficial) estaba tardando en ocupar un sitio tan representativo.
Es muy sencillo conocer la tendencia política de alguien si tenemos acceso a sus cookies. Dónde y cómo se informa, las webs que visita, lo que publica,… todo ello sirve para que un algoritmos nos encasille en una u otra ideología sin más complicación.
Esta información es demasiado jugosa para los políticos como para dejarla escapar y el Senado ha aprobado la nueva Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y Garantías de Derechos Digitales que busca ajustarse a la normativa europea que entró en vigor el pasado mes de mayo.
¿Qué pueden hacer con esta nueva ley?
Pero al parecer han dejado algunas puertas abiertas modificando la Ley Orgánica del Régimen Electoral General y que han generado bastante revuelo en las formaciones políticas que han votado en contra trasladándose el debate en las redes sociales.
La ley permitirá crear un perfil ideológico en base a nuestros datos recogidos y publicados en Internet. Tal y como dije anteriormente, en la era de las redes sociales es realmente sencillo conseguir encasillar a alguien en una determinada ideología y con ella mandar propaganda por WhatsApp sin consentimiento.
Hay servicios en Internet a los que explícitamente otorgamos todos los derechos de uso sobre nuestras publicaciones. Por ejemplo, cualquier tweet que publiquemos pasa a ser de dominio de Twitter o cualquier foto que subamos a Google Fotos pasa a ser propiedad de la gigante californiana.
Pero si a este perfil ideológico creado le unimos, además, un número de teléfono tenemos el arma perfecta para los partidos políticos. Ya que podrán enviarnos cualquier tipo de propaganda por WhatsApp o cualquier otra plataforma sin nuestro consentimiento.
Y es ahí donde está el quiz de la cuestión. Todo tipo de empresas, corporaciones o colectivos deben pedirnos expresamente autorización para el uso de nuestros datos personales para otros fines que no sean los originales.
En cambio, con esta nueva LOPDP no tendremos que otorgar permiso alguno si de un partido político se trata. La Ley contempla que la propaganda que pudieran enviar los partidos políticos es de interés público y no se recoge consentimiento necesario alguno para el posible envío de propaganda.
Tras pasar por la cámara alta se espera que se publique muy pronto en el Boletín Oficial del Estado y entre en vigor en los próximos días. Así que si un día recibes un WhatsApp de una formación política con propaganda y sin haber dado consentimiento expreso, seguramente ya estés encasillado.
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