La Gen Z vuelve a la tecnología vintage con los móviles tipo concha, ¿un buen augurio para los plegables?
Lo viejo está de moda y muestra de ello es que la Gen Z vuelve a la tecnología vintage con los móviles plegables. El uso de lo que está en el pasado por las actuales generaciones no se reduce solamente a la moda, como cierto tipo de ropa y zapatos, sino también a la tecnología.
Los terminales plegables de la década de los 90 se ha ido popularizando entre los más jóvenes que nunca supieron lo que era utilizar un StarTAC III o un Razr V8 de Motorola.
No te hablamos únicamente de los terminales plegables de alta gama como el Galaxy Z Flip, que ciertamente ha conseguido un gran nicho en el mercado, sino también de terminales baratos de supermercado que pueden comprar por unos cuantos euros y luego son protagonistas de videos en TikTok y Reels de Instagram.
Vemos cómo muchos jóvenes usan estos dispositivos desechables para mostrar asombrados su básico funcionamiento y además contar cómo se puede lograr un estilo relajado con imágenes borrosas a través de las cámaras de muy baja calidad de estos móviles plegables, baratos.
Este hecho debe llamar mucho la atención de los fabricantes, ya que es un nicho que claramente se abre.
En 2023 puede popularizarse mucho más la posibilidad de emplear estos teléfonos plegables básicos para desconectarse de los acechantes datos que te hacen ver redes sociales, notificaciones, perfiles y videos durante todo el día, en su lugar llegan a una tecnología simplista en la que solo reciben llamadas o SMS.
Una inspiración que se hace viral
Sabemos que los famosos rápidamente toman partido de las tendencias para empatizar con el público y muestra de ello es la cantante Camila Cabello, quien apareció con un teléfono TCL plegable antiguo, además hizo referencia a que podía escribir una canción al respecto.
Esto es solamente una muestra de lo que está sucediendo. Desde tiktokers famosos, YouTubers, perfiles de Instagram… todos hacen eco de la desconexión vintage que puede brindar uno de estos terminales, como si se tratase de una verdadera novedad. Claro, después de tres décadas de haber, prácticamente, desaparecido, es lógico que lo puedan observar como algo “nuevo”.
Otros famosos como la actriz de Disney, Dove Cameron, señaló que también había decidido dejar a un lado su teléfono inteligente de gran pantalla, por un teléfono plegable de los 90, un Matrix Y, que es un dispositivo básico y que le permite alejarse de las nocivas pantallas y las muchas horas que pasaba en las redes sociales.
Una respuesta a la hiperconexión
Entre los grandes problemas que enfrenta la Generación Z está que nacieron básicamente conectados, no conocen como es la vida sin Internet.
Desde 2010 en adelante, la presencia de las redes sociales en los teléfonos, comenzando por el BlackBerry, luego a la revolución de los teléfonos inteligentes de Samsung y la llegada del iPhone, fueron invadiendo lentamente todos los espacios, al punto de hacer creer a las personas que eso que sucede allí es realmente la vida real.
Los episodios de depresión adolescente, por la presión social en esos espacios virtuales, el bullying y la sobre exposición, han dado como resultado que en una década aumente la tasa de afecciones emocionales a casi el doble, específicamente entre los más jóvenes, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU.
Pero la propia mente busca escapar y es así como la respuesta de los jóvenes es ahora la necesidad de desconectarse y se ha convertido en una moda.
Los jóvenes en las grandes ciudades de Estados Unidos y de otras partes del mundo, cada día van adoptando estos terminales de la vieja escuela, con sus cámaras básicas, y, en cambio, optan por vivir de la conexión humana real como una novedad.
Salen de fiesta y dejan los móviles inteligentes en casa, para llevar en el bolsillo un teléfono plegable básico con el que solo pueden llamar para pedir un taxi o contactar con sus amigos.
La oportunidad para los fabricantes
Si los fabricantes de móviles apuntan a vender más barato, pero vender más unidades, entonces este momento con los teléfonos plegables antiguos y la Generación Z, pudiera ser una gran oportunidad.
Una de las empresas que puede estar entendiendo esta necesidad de comunicación básica y desconexión es HMD Global, que licencia la marca Nokia, ellos señalan que se trata de un verdadero reto, porque estos jóvenes nunca tuvieron un Nokia, sino que lo conocieron como un dato curioso por Internet.
Está creciendo, además, el interés por las fotos de baja calidad en estos teléfonos básicos. Los jóvenes viven, como toda una experiencia, el poder esperar hasta llegar a casa para conectar el móvil al ordenador y descargar sus fotografías, en lugar de enviarla por WhatsApp a su amigo rápidamente, utilizando la cámara de 108 megapíxeles de su Galaxy S22 Ultra.
De hecho, muchos optan por recrear estas fotografías divertidas y de baja calidad, para ello van echando mano de apps populares como “Hisptamatic” y “Dazz Cam”, que actualmente van creciendo en descargas en las tiendas de aplicaciones.
Ante esto, Nokia señala que comprende la necesidad de desconexión y para ello ofrecen alternativas que están disponibles en las grandes tiendas mayoristas, por ejemplo, está el modelo plegable Nokia 2760 Flip o el Nokia 2780 que se puede encontrar en Amazon.
Se tiene previsto un crecimiento de 29.000 millones de dólares para el mercado de los teléfonos plegables básicos, al cierre de 2025.
También hay alternativas intermedias que atraen la mirada, como el Galaxy Z Flip que nombramos al comienzo. Samsung ha hecho una distribución de más de 10 millones de unidades desde que se lanzó la primera versión, ocupando el 88 % del mercado de teléfonos plegables en todo el mundo.
En España, vemos una reservada, pero emergente, oferta de teléfonos básicos plegables, que en su mayoría no superan los 60 euros.
Por ejemplo, Panasonic ofrece modelos sencillos, pero con diseños atractivos y hasta en colores variados, así mismo, Alcatel y Nokia tienen alternativas, pero también hay otras marcas menos reconocidas como Uleway que ofrecen móviles plegables básicos.
Estos terminales destacan por tener cámaras básicas de apenas unos 2 megapíxeles, además de pantallas apenas más grandes que un smartwatch de Apple, también incluyen funciones adicionales como botón de SOS para llamadas de emergencia, agenda telefónica y teclas físicas.
Quizás, uno de los mayores atractivos para la generación Z, además de la desconexión, es que todos estos teléfonos tenían una gran capacidad para su autonomía, ya que podían durar días funcionando con una sola carga y esto es algo muy conveniente si estás de viaje con tus amigos, o quizás de vacaciones por el verano.
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