Nintendo Switch, primeras impresiones

Tras más de dos horas a los mandos de Nintendo Switch, nuestras primeras impresiones se resumen en que estamos ante una consola con el ADN de la compañía nipona, es decir, que prima la diversión por encima de todo. En este sentido, la férrea ideología de los de Kioto juega tanto a su favor como en su contra, como viene siendo habitual con los últimos productos y decisiones de la empresa.

Ya hemos explicado el concepto de Nintendo Switch, así que ahora nos centraremos en las impresiones que nos ha generado al probarla. Por una parte, y centrándonos en la propia consola, destacamos la comodidad y ergonomía de la misma tanto en su versión sobremesa, acompañada del eficiente Mando Pro, como en su versión portátil, que es la que más sorprende a primera vista.

Y es que jugar a Nintendo Switch en modo portátil, controlándola con los Joy-Con, es una auténtica gozada en varios aspectos. De entrada, se siente sorprendentemente ligera y ergonómica, y la calidad de imagen se encuentra realmente lograda, con colores vivos y definidos. Los Joy-Con son realmente cómodos, fáciles de poner y quitar pulsando un botón y deslizándolos con suavidad, y la transición a la hora de colocar la consola en su base para jugar en televisión es meramente testimonial, tarda muy poco y se nota fluida.

Por el contrario. la portabilidad del dispositivo es bastante reducida, ya que, si bien su peso se asemeja al de una Nintendo 3DS XL, el tamaño de su pantalla, y la necesidad de cargar con los mandos, impide que quepa en cualquier bolsillo, por lo que necesitaría de una mochila, bolso o similares.

1-2-Switch, el Wii Sports de Switch

En cuanto a lo que de verdad importa, los juegos, tenemos sensaciones encontradas. Por una parte, pudimos probar cuatro de los minijuegos que ofrece el título 1-2-Switch, que saldrá el día de lanzamiento de la Nintendo Switch, el próximo 3 de marzo.

Estas pruebas recuerdan mucho a lo que en su momento ofreciera Wii Sports, es decir, que sirven más que nada para demostrar las capacidades y sensores de los Joy-Con, pero poco más. Son divertidas, sí, pero la idea de venderlo como un juego independiente no convence, todavía menos cuando el propio Wii Sports venía junto a la consola de forma gratuita. Los minijuegos de 1-2-Switch son bastante variados, estos son a los que hemos jugado:

1. Una especie de enfrentamiento entre dos vaqueros en el que se ponen a prueba los reflejos de los jugadores al desenfundar la pistola.
2. Una prueba en la que, basándose en los sensores de movimiento y vibración de los Joy-Con, había que adivinar el número de canicas que había en una caja (una experiencia bastante curiosa).
3. Un minijuego cuyo el objetivo no era otro sino ordeñar a una vaca, lo que requería una cierta coordinación.
4. Una última prueba en la que había que descifrar la combinación de una caja fuerte basándose en unas minúsculas vibraciones producidas por los mandos.

Mario Kart y Arms, los títulos destacados tras el lanzamiento

El siguiente juego fue la versión remasterizada del Mario Kart 8 de Wii U, cuya mayor novedad a los mandos fue la de poder probar el juego en su versión portátil, una experiencia mucho más satisfactoria que jugarlo en sobremesa, con un nivel de detalle gráfico más que logrado y unos controles (Joy-Con) que, si bien no responden de igual forma que el Mando Pro, sorprenden por lo cómodos que llegan a ser.

También pudimos probar Arms, una suerte de demo jugable de lo que puede llegar a ofrecer la Nintendo Switch. El juego en sí enfrenta a dos luchadores que, a base de puñetazos deberán tumbar al adversario. Aunque se trata de una nueva saga, en realidad nuestra impresión es que se asemeja a una versión más pulida de lo que ya ofrecía el boxeo en Wii Sports, aunque es cierto que la experiencia es muy disfrutable.

Los controles suelen responder más o menos en condiciones y los distintos estilos de lucha de los personajes seleccionables, cuyo diseño desenfadado recuerda a lo visto en Overwatch, están muy bien diferenciados entre sí. Tiene potencial, aunque la preocupación latente es su alarmante falta de contenido, al menos a priori.

Splatoon 2, disparos al estilo Nintendo

Tras Arms probamos uno de los platos fuertes de la Nintendo Switch para verano, Splatoon 2. El videojuego se siente como una continuación quizás demasiado directa del original, aunque eso no quita que ofrezca diversión en estado puro. El concepto es simple, se trata de un shooter en el que el objetivo es llenar el mapeado de tinta de colores (cada equipo tiene su propio color de tinta) hasta que, pasado el límite de tiempo, tu equipo haya pintado más que el contrario.

Existen varios tipos de armas y mecánicas, como la de convertirte en calamar y nadar en tu propia tinta para recorrer el mapa más rápidamente y evitar las balas de tinta enemiga, y el ritmo de las batallas es frenético y adictivo.

Pudimos jugar 3 partidas 4 VS 4 tanto en modo sobremesa como en portátil, y ambas versiones se sienten fluidas y con unos controles muy intuitivos, sobre todo en modo portátil, que hace un mejor uso del giroscopio de la consola a la hora de mover la cámara (único modo de girar la vista en la demostración que pudimos probar, aunque en la versión final se podrá usar también el joystick tradicional para ello).

Luego le llegó el turno a Snipperclips, un videojuego independiente de puzles para dos personas realmente ingenioso y divertido. Los jugadores encarnan a dos trozos de papel que deberán adoptar diferentes formas y cooperar entre ellos para superar los distintos niveles que propone la demo. Disponen de la habilidad de “recortarse” mutuamente como si de afiladas tijeras se trataran. Ensayo y error para un proyecto más que interesante y que derrocha buen gusto.

Zelda y Switch, combo perfecto en el lanzamiento

Y, finalmente, pudimos ponernos a los mandos del que será el único vende-consolas de Nintendo para los próximos meses, el nuevo Zelda: Breath of the Wild, el videojuego que, tras retrasarlo en Wii U, la compañía nipona pondrá de lanzamiento el mismo día que la propia Switch, el próximo 3 de marzo.

El videojuego en sí luce de maravilla, es majestuoso, el control, tanto en modo portátil como en sobremesa, es maravilloso, genial en lo artístico y algo más discreto en lo técnico (ciertas animaciones y texturas recuerdan a lo visto en Skyward Sword) y un doblaje al castellano más que competente.

No pudimos ver muchas de las nuevas habilidades y poderes de Link, aunque sí podemos destacar lo bien y fluido que iba en modo portátil, y la comodidad que ofrecen los Joy-Con para un juego que, recordemos, exigirá rapidez y habilidad al jugador.

En definitiva, nuestras primeras impresiones respecto a Nintendo Switch nos la hacen ver como una pieza de hardware a tener muy en cuenta… quizás para Navidades, periodo en el que esperemos que la consola cuente con un catálogo algo más extenso y variado.

Desde Nintendo aseguran que habrá nuevo Mario y Xenoblade para finales de 2017 y se agradecería un precio más ajustado a lo que ofrece la máquina, ya que a día de hoy nos parece excesivo pagar más de 300 euros por una consola sin juegos ni accesorios como el Mando Pro, indispensable para los jugadores más exigentes y veteranos.