Las actualizaciones llegan para mejorar, pero hay casos en los que empeoran aún más y casi nunca se avisa, y eso es lo que Apple se ha propuesto. Así que la empresa de la manzana deberá avisar si una actualización ralentiza el iPhone.
En un momento clave para las tecnológicas del mundo, cualquier mínimo detalle en pro de los usuarios, es recibido como un soplo de aire fresco. Apple quiere ser más transparente, de ahí que haya aceptado las exigencias de La Autoridad de Competencia y Mercados, tal y como ha informado la web de la embajada británica.
Las actualizaciones nunca son perfectas
Allá por 2017, hubo una actualización que no hizo ningún bien al iPhone, iOS 11.3, y eso que llegó para mejorar la batería. Hubo usuarios que gastaron dinero en reparar sus terminales porque creían que estaban mal, cuando en realidad fue la actualización quien provocó la ralentización.
La CMA afirma que muchos usuarios no pudieron encontrar la información suficiente para saber que las baterías de los móviles se deterioran con el paso del tiempo.
Esta actualización causó una notable ralentización en los iPhones, incluso Apple propuso un cambio de baterías gratuito a todo aquel usuario de iPhone que estuviese afectado por una batería defectuosa. Y ya después lanzó aquella actualización de 2017 que hemos comentado.
Al final fue casi peor el remedio que la enfermedad. Y es que la lista de actualizaciones con fallos es bastante larga en algunas empresas, y siguiendo con Apple, recordamos que iOS 12.1.2 dio problemas de conectividad en el iPhone.
Siempre que se actualiza conviene estar pendiente de algunos factores claves, porque nadie conoce mejor nuestro móvil que nosotros mismos:
- Batería: es el primer factor en sufrir las consecuencias de una actualización con fallos, es por eso que se recomienda observar los consumos de batería, así como los tiempo de carga tras actualizar.
- Rendimiento: Sea un gama baja, media, o alta, el rendimiento puede verse afectado tras una actualización. A veces son lags muy sutiles, otras son claros indicios de que algo no está yendo bien. Esto se nota en el desempeño del terminal a la hora de jugar, o incluso en las animaciones del propio sistema operativo.
A partir de ahora, Apple informará de las actualizaciones de una forma más completa y de fácil acceso. Además, Apple acompañará esa información con una guía para que los usuarios sepan cómo maximizar la vida útil de sus baterías.
La cosa no se queda ahí, sino que al comprometerse por medio de la CMA, en caso de incumplir alguno de los acuerdos y compromisos, La Autoridad de Competencia y Mercados podría emprender acciones legales.
Así que tanto en el iPhone actual, como en los futuros, Apple se compromete firmemente a avisar cuando una actualización ralentiza sus smartphones. Esperamos que no sea una moda pasajera y se mantenga en el tiempo, al igual que se convierta en costumbre en otras grandes empresas del sector tecnológico.
¿Te ha fallado alguna actualización de iPhone? ¿Qué opinas de las nuevas medidas de cara a las actualizaciones futuras?
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