La barrera de los 30 años, esa gran temida pero donde Tinder ve un negocio al que hoy se le pone fin en forma de condena por cobrar de más a sus usuarios mayores de 30 años.
Tinder cobra más a los usuarios que pasan los 30 años en su servicio de suscripción premium Tinder Plus. Han sido varios los demandantes que ahora recibirán una compensación económica de 5.000 dólares por parte de la app de citas.
Tinder y la barrera de la edad
Parece prehistórico este título, pero muy a nuestro pesar es la realidad. La app lider en citas online cobra 10 dólares más por su servicio premium a los usuarios que superan los 30 años de edad.
Fue en 2015 cuando Tinder lanzó Tinder Plus y ofrecía ciertos servicios extras con respecto a la cuenta normal que era gratuita, y sigue siéndolo.
Tinder Plus daba un plus, y nunca mejor dicho, en cuanto al número de match que se pueden hacer en un día, la opción de pasaporte y los Super Likes. Pero su precio para menores de 30 años era, y es, 9,99 dólares, sin embargo para los mayores de 30 años, ese precio asciende a los 19,99 dólares.
Es decir, 10 dólares más por tener 30 años. Esto se considera discriminación por edad algo penado por ley (todo tipo de discriminación), así que son varios los usuarios que han decidido plantar cara a Tinder y demandarle por este hecho.
En su momento Tinder se defendió alegando que Spotify hacía exactamente lo mismo con los precios de sus servicio dependiendo de si eres estudiante o no.
Tras la resolución del conflicto, Tinder decidió dejar de cobrar precios distintos y discriminatorios. Eso sí, lo dejará de hacer en California que es donde nació la demanda.
La empresa líder en citas online compensará a unos 250.000 usuarios afectados y les ofrecerá diversos descuentos, o suscripciones temporales en su más prestigiosa categoría: Tinder Gold.
Supuestamente, Tinder dejará de cobrar más a los usuarios mayores de 30 años, solo falta esperar que esa resolución se extienda al resto de países y que se termine con la discriminación por edad en las apps de citas online.
Vía: Law360
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