Debes tener cuidado con este peligroso correo, en el que amenaza que "no publicarán tus vídeos íntimos si les pagas". Se trata de una estrategia de extorsión que tiene muchos años, pero cada cierto tiempo renuevan sus campañas y lamentablemente, las personas continúan siendo víctimas.
Actualmente, la campaña, a través de correos electrónicos fraudulentos, exige el pago de una cantidad de dinero en bitcoin y así evitar que puedan compartir con tus conocidos unas supuestas grabaciones íntimas, un crimen conocido como sextorsión.
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Es un engaño en el que el delincuente realmente no tiene ningún tipo de grabación de la víctima, pero crea toda una situación en la que puede llegar a preocupar, utilizando unos pocos datos personales.
El objetivo de esta estafa es lograr generar un estado de angustia en la persona para que no lo piense demasiado y actúe de forma impulsiva, entregando el dinero exigido sin mayor reflexión al respecto, por eso establecen lapsos de tiempo muy cortos, así no habrá espacio para evaluar las alternativas.
Podrás notar que se trata de esta estafa, porque el asunto del correo que recibes puede decir “Esperando el pago” y el cuerpo del texto está escrito completamente en español, con buena ortografía, pero con un lenguaje poco natural que denota provenir de una traducción.
En el mensaje podrás leer algunos argumentos, como que tu ordenador fue infectado con un malware espía, y que la razón de por qué no ha sido detectado es que es imperceptible para los antivirus, algo que, definitivamente, no es cierto.
Establecen un lapso de 48 horas para que realices el pago y a cambio, te prometen destruir el material sin dejar rastros, pero en caso contrario publicarán tus fotos o tus grabaciones íntimas a tu círculo personal y en páginas de contenido sexual.
Cómo evitar la sextorsión
En primer lugar, al recibir este tipo de correos, debes eliminarlo de inmediato y previamente reportarlo como spam, porque no es cierto que tengan algún tipo de video sobre ti. En todo caso, deberían proporcionar alguna prueba al respecto primeramente.
Este ataque realizado con ingeniería social, busca también determinar cuáles cuentas electrónicas se encuentran activas, porque forman parte de una base de datos de la que no tienen certeza sobre su efectividad. Al contestar, le dejas la puerta abierta a otros intentos de estafa, como un ataque phishing, por ejemplo.
En caso de haber realizado un pago, recopila todas las pruebas que puedas tener al respecto y realiza una denuncia en las unidades de fraudes electrónicos de las fuerzas de seguridad locales.
Estas denuncias también podrán servirte para solicitar que cualquier contenido propio que haya sido publicado sin tu consentimiento, pueda ser eliminado de Internet de forma inmediata.
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