Cómo mejorar la cobertura WiFi

¿Quieres mejorar la cobertura WiFi de tu casa, pero no sabes cómo hacerlo? Es un problema muy común que puede no tener una solución concreta, sino que hay que probar varios trucos para comprobar cuál de ellos te permitirá de verdad que tu cobertura WiFi pueda mejorar.

Hay muchos factores que pueden influir en la calidad de la cobertura de tu red WiFi, por lo que las soluciones para intentar mejorarla pasan por probar distintos elementos, solo así encontrarás la más idónea en tu caso y te servirá para disfrutar de una mejor conexión WiFi.

No está de más decir que si puedes utilizar una conexión por cable en la oficina o en tu casa mucho mejor porque tendrás una señal más estable y rápida, aunque con la aparición de routers cada vez más avanzados, esa diferencia cada vez se va acortando.

En cualquier caso, lo anterior es aplicable si utilizas ordenadores en casa, no así con móviles u otro tipo de dispositivos que hacen uso de la conexión WiFi, que debe ser la mejor posible para evitar cortes cuando estás consultando o viendo algo en Internet, etc.

Si actualmente cuentas con una conexión WiFi y notas que no la estás aprovechando o crees que no es todo lo buena que debería ser y crees que es mejorable, es recomendable que pruebes varios métodos para intentar mejorarla en la medida de lo posible.

Ubica bien el router

Una de las medidas más importantes que puedes tomar sin gastar un solo euro es intentar mejorar la ubicación del router si es posible. Tanto si lo tienes en una oficina como si lo tienes en tu casa, la medida más acertada es colocar el router en el centro de la estancia.

Es decir, si tienes una casa de una sola planta con varias habitaciones, lo ideal es colocar el router en el lugar más céntrico, de forma que la señal WiFi pueda ser repartida de forma más equitativa por cada una de las habitaciones, aunque esto no siempre es posible.

Puede servir en ciertas situaciones, por ejemplo, si existe esa posibilidad de colocarlo en el centro de tu casa. Pero no siempre es así porque la toma de fibra por una u otras circunstancias puede estar en otro sitio, o porque simplemente, aunque lo hagas no llega el WiFi bien a todas partes.

Aparte de lo que te hemos comentado anteriormente, te dejamos con algunos tips más que debes tener en cuenta para poner el router en un lugar óptimo:

1. Aleja el router de aparatos eléctricos: mantén el router alejado de televisores, equipos de música, cables y otro tipo de dispositivos electrónicos que puedan mermar su señal. También del microondas o incluso de los teléfonos inalámbricos que usan la frecuencia de 2,4 GHz.
2. El router en zonas elevadas: coloca el router en un lugar medio-alto, es decir, encima de un armario o en una mesa relativamente elevada es mucho mejor que ponerlo en el suelo.
3. Coloca el router en un área libre: evita, si es posible, colocar el router cerca de paredes, es mejor ubicarlo en un espacio más libre de forma que la señal WiFi se vea disminuida lo menos posible, pues las paredes es uno de los elementos que hacen que la señal sea de menos intensidad.
4. Evita lugares cerrados: evita poner el router en lugares cerrados o muy ocultos, con esto nos referimos a descartar armarios cerrados, rincones ocultos, cajones o cualquier otro sitio donde el router no esté muy a la vista, todo eso influirá en la calidad de la cobertura WiFi que ofrece.

Coloca correctamente las antenas

Las antenas del router son el elemento que proporciona el WiFi. Para que la señal y, por consiguiente, la cobertura WiFi sea la mejor posible, su disposición o colocación es algo que no hay que descuidar en absoluto porque puede marcar la diferencia en muchos casos.

Debes atender a este elemento en caso de que dispongas de un router que tenga antenas, porque no todas las tienen, por ejemplo, el router de Movistar y algunos más. Pero routers de otros fabricantes que puedes comprar en tiendas como Amazon sí que disponen de 2, 3 o más.

Si tu router dispone de al menos 2 antenas o más, pon una de ellas en vertical y la otra paralela a ella, es decir, en horizontal. Es decir, entre ambas deben cumplir un ángulo de 90 grados, al contrario de lo que se piensa que deben estar todas hacia arriba.

Es un error bastante común porque siempre aparecen así en fotos de routers e incluso en las propias cajas, pero más bien es una cuestión de estética que otra cosa. Con la colocación de las antenas en esta posición, deberías notar una mejor cobertura, no así velocidad que es distinto.

Coloca papel de aluminio en las antenas

Por surrealista que pueda parecer, puedes colocar un poco de papel de aluminio en la parte trasera de las antenas para que la señal pueda redireccionarse mejor y ampliar la cobertura, mejor incluso que una lata cortada de refresco, es más fácil y sencillo.

Ten en cuenta que lo hace este procedimiento es ampliar la señal hacia un lugar concreto, por lo que probablemente la señal no llegue correctamente hacia otras zonas o sea un poco más reducida. Solo es cuestión de probar si en tu caso mejora la cobertura.

Compra nuevas antenas

Hay routers que permiten cambiar las antenas que traen por otras nuevas, lo cierto es que quitarlas es muy fácil porque bastaría con desenroscarlas de la parte trasera y enroscar las nuevas. Con ellas podrás tener una mayor ganancia y ampliar un poco más la cobertura.

No suele ser un método muy efectivo, pero puedes probarlo para conocer si esta medida es suficiente para ti, en Amazon dispones de antenas por menos de 20 €, a cambio podrías obtener una mayor cobertura dentro de tu casa u oficina, llegando la señal a donde antes no llegaba.

Mantén actualizado tu router

Es importante también mantener actualizado el firmware de tu router, siempre que sea posible. Esto ayudará a que todas y cada una de sus funcionalidades, incluida su conectividad WiFi, sea de alta calidad y óptima para proveer una señal estable, de calidad y con gran alcance.

Basta con acceder a los ajustes internos del router vía 192.168.1.1 o incluso a través de la dirección 192.168.0.1, ahí tendrás que ir a alguna sección llamada “actualización” para poder comprobar si tu router ofrece alguna actualización y que esté lista para instalar.

Utiliza repetidores WiFi

Si con alguna de las opciones anteriores, la señal WiFi sigue siendo muy baja, es momento de plantearse la compra de algún o algunos repetidores WiFi. No son más que dispositivos cuya funcionalidad es precisamente repetir la señal de conexión WiFi por toda la casa.

De esta forma podrás ampliar la cobertura WiFi en lugares en los que anteriormente la cobertura era muy débil, lo que puede suponer una solución efectiva. Su configuración suele ser bastante sencilla, primero debes colocarlo cerca del router y una vez lo has configurado, tendrás que ponerlo en aquel sitio donde la cobertura sea menor o más pobre.

El inconveniente que tienen estos dispositivos es que no siempre son efectivos, además, cada repetidor WiFi crea una red independiente de la principal, por lo que, si tienes varios repetidores conectados, el móvil o portátil se tendrá que conectar cada vez a una red nueva y puede ocasionar algunos instantes sin conexión.

En Amazon y PcComponentes hay gran variedad, con precios que no superan los 40 euros, incluso puedes encontrar algunos en ofertas. Te recomendamos optar por repetidores WiFi con buenas opiniones, solo así sabrás que a las personas que los han comprado les ha servido.

Prueba las redes WiFi Mesh

Especialmente si vives en una casa de 2 o más plantas o si incluso habitas en una casa muy grande y ver que la cobertura WiFi es escasa, podría plantearte el hecho de sustituir el router actual de tu operador por un router en malla y probar las redes WiFi Mesh.

Con respecto a los repetidores, es una opción más avanzada y potente. Normalmente, vienen en packs de 2 o más “satélites”, que puedes ampliar según las necesidades que tengas y lo que lo hacen es crear una red en malla, apareciendo como una única conexión WiFi.

Tenemos el router base y después uno o más satélites o que también podemos llamar “puntos de acceso”. Todos se conectan entre sí y es así como son capaces de crear una única red WiFi, de manera que, aunque te muevas por toda la casa, siempre estarás conectado a la misma red.

Nosotros hemos analizado, por ejemplo, el sistema WiFi en malla TP-Link Deco P9, que ofrece una gran cobertura WiFi, una gestión sencilla y un precio bastante competitivo. Debes tener en cuenta un detalle importante, no son sistemas precisamente económicos, pero puedes encontrar ofertas muy atractivas en distintas tiendas online.

Utiliza la banda de 2,4 GHz

La totalidad de los routers que hay en el mercado ofrece conectividad WiFi en dos bandas, trabajan en la frecuencia 2,4 GHz y en la de 5 GHz, siendo la primera la más popular y conocida, y en algunos casos, la única que ofrecen muchos dispositivos de red.

Sin embargo, la banda de 5 GHz comienza a ser algo muy común y cada vez son más los routers los que permiten esta posibilidad, a esos se les llama routers con banda dual. La frecuencia de los 5 GHz tiene sus ventajas (menos interferencias y más velocidad), pero uno de sus grandes inconvenientes es que la cobertura es menor que la que ofrece la banda de 2,4 GHz.

La recomendación, por tanto, es utilizar la banda de 2,4 GHz para navegar a través de WiFi en lugar de la de 5 GHz porque te asegurarás una mejor cobertura, es decir, que la señal WiFi llegará más lejos que si usas la red de 5 GHz para navegar.

Esto es algo que puedes elegir en la configuración del propio router, entrando vía web a través de la dirección http://192.168.1.1 o similar, pero es necesario tener un mínimo de conocimiento para ajustar distintos parámetros técnicos del router, así que debes tener cuidado.

Los routers que permiten escoger entre navegar mediante WiFi en la banda de 2,4 GHz o en la de 5 GHz son los routers dual band, el que ofrece Movistar es uno de ellos porque crea dos redes WiFi, una que utiliza la frecuencia de 2,4 GHz y otra llamada WiFi Movistar Plus que hace uso de banda de 5 GHz, con todas las ventajas e inconvenientes que eso conlleva.

Hay muchos trucos que puedes poner en práctica para mejorar la cobertura WiFi de tu hogar, siempre que notes que no es la adecuada, aunque como ya mencionamos antes, si utilizas un ordenador lo mejor es optar por hacer uso de la conexión a Internet mediante cable.